Diálogo Nº 12254
Diálogo iniciado en el artículo Me gradué: ¿y ahora qué?
La graduación no es una llegada sino un punto de partida: con la responsabilidad de pensar en profesional; de leer mucho y estudiar más que antes; de ser inquieto de verdad; de analizar los puntos fuertes y débiles propios y como exponenciarlos o corregirlos; de observar más que juzgar; de sentirse distinto y saber escuchar al comitente y aportarle soluciones; de dejar de creer que uno ES ante los demás un referente sino que uno SIRVE a un sector que lo requiere; de no creerse los elogios gratuitos; de construir un camino propio sólido ... se hace camino al andar con convicción y perseverancia