Alineamos tu marca con tus objetivos y necesidades. Soluciones expertas para directivos de marketing y comunicación, o dueños de pymes que necesitan maximizar el rendimiento de sus recursos de branding
Conocer a los consultoresMuchas decisiones de marca se toman por intuición o moda, sin certezas técnicas. Identificamos las necesidades de cada marca para ayudarla a obtener los resultados buscados:
La marca no logra comunicar un valor diferencial, forzando a la empresa a competir por características o precio, en lugar de por preferencia.
La marca se aplica de forma inconsistente a través de los canales, creando confusión y erosionando el reconocimiento y la confianza.
Se percibe la necesidad de un cambio radical (“hay que cambiar el logo”) sin un diagnóstico previo que justifique los riesgos y costos aparejados.
Las decisiones sobre la marca se basan en opiniones (“me gusta”, “no me gusta”, “no nos representa”), careciendo de un marco técnico para evaluar su rendimiento real.
Nuestro enfoque es clínico. No empezamos con la solución, y luego le inventamos una narrativa, sino con un diagnóstico profundo de los activos identificatorios para optimizar recursos y actuar solo sobre los recursos que lo necesitan.
Analizamos la marca actual con parámetros de rendimiento técnicos. ¿Funciona? ¿En qué falla? ¿En qué no falla? ¿Existe un capital marcario a proteger?
Evaluamos la marca en el contexto de su competencia y sector para determinar la estrategia de diferenciación adecuada.
Entregamos un informe de diagnóstico y un plan de acción, que, según el caso, puede implicar desde la no intervención hasta un inevitable cambio de marca.
Servicio de consultoría y diagnóstico para alinear la identidad corporativa de su empresa con sus objetivos de negocio.
Servicio de auditoría de marca y hoja de ruta para directivos que buscan optimizar el rendimiento de su marca como activo de negocio.
Síntoma: Marketing siente que el logo, con alto reconocimiento, es “viejo” y presiona por un cambio total.
Diagnóstico: La auditoría reveló que el problema no era el logo, sino un sistema de aplicaciones visuales caótico.
Resultado: Se recomendó invertir en un nuevo sistema de identidad visual, protegiendo el valioso capital marcario y ahorrando más del 70% del presupuesto de un rebranding.
Síntoma: Tras una adquisición, dos marcas con legados fuertes pero incompatibles generaban confusión interna y externa.
Diagnóstico: Ninguna marca podía absorber a la otra sin generar rechazo.
Resultado: Se creó una nueva identidad construida sobre los elementos conceptuales más fuertes de ambas, proyectando unidad y acelerando la integración de los equipos.
Antes de invertir en un cambio riesgoso y potencialmente costoso, invierta en la certeza de un diagnóstico experto. Proteja y optimice el activo más importante de su empresa: la marca.
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