Estrategia didáctica en dibujo para el diseño

Pensar que solo existe una forma o método para dibujar es limitar las posibilidades de solución al problema de representación, cuando en realidad son requeridos múltiples métodos de dibujo para resolver cualquier ejercicio práctico. Por otro lado, la elección del método debería estar relacionada con las habilidades particulares de cada alumno. Por ello, una parte importante de esta propuesta es la inclusión del conocimiento sobre una amplia diversidad de métodos de dibujo y la transmisión de ellos al alumno, pues así se brinda un abanico de instrumentos para dar estructura al pensamiento, para enfrentarse con la representación de un objeto o persona. Parini la define como «la estructura constitutiva es el núcleo generador de la imagen producida mentalmente cuando se piensa o se nombra una cosa y que, por tanto, podemos definir como representación mental».¹

El concepto de estrategia de dibujo es un término originalmente propuesto por Gómez Molina (2006):

«El auténtico dibujo no está en el «dibujo final», sino en la «estrategia» que «dibuja» la malla que articula los estratos de «dibujos» que componen el proyecto. Una acción que permite mantener la individualidad de cada uno de ellos, como un sistema contradictorio de posibles reconstrucciones, y como la clave de una reflexión diferenciada sobre la identidad de los representado. La pérdida de los nombres, boceto, esquema, nota, apunte, esbozo, etc., su neutralización y su indiferenciación en el genérico «dibujo» es una pérdida irreparable de posibles construcciones de sentido».²

Como estrategia didáctica, se propone que las asignaturas de dibujo no sean únicamente planeadas como taller, sino que en todo momento la enseñanza-aprendizaje y la práctica se eleven a un nivel académico integral de calidad, al involucrar conocimientos, habilidades y actitudes. Por ello, se plantea que en las asignaturas de dibujo se incluya un marco teórico, donde se citen a los exponentes o el contexto que sustenta el pensamiento que dio origen a cada método. Eso genera un cuadro histórico de lo que el método significó y sus aportaciones a la cultura en general. De esta forma el dibujo se entiende no solo como representación, sino como una forma de pensamiento y de un modo de interpretación del entorno.

Esta estrategia busca una didáctica integral. El enfoque inevitablemente evoca al método de Pestalozzi, que pensaba firmemente que el dibujo educa la mente, la mano y el corazón. Nuestro método didáctico del dibujo está basado en una forma de desarrollo de habilidades, competencias y un medio para activar la creatividad.

La primera estrategia es demostrar a los alumnos lo que no están viendo y si están repitiendo esquemas en vez de observar. Sin una observación cuidadosa es imposible la incorporación de nuevos esquemas. Por otro lado el aprendizaje requiere una observación minuciosa para la reconstrucción y modificación de esquemas anteriores, así como la incorporación de nuevos. Es importante entender que el aprendizaje del dibujo para el diseño es un recurso valioso para el dibujo de representación sin modelo, y que todos podemos tener oportunidades de hacer más representaciones específicas cuanto más esquemas hayamos aprendido. Jerome Bruner (1987) nos explica que «la enseñanza del descubrimiento, en general, no implica tanto el proceso de guiar a los estudiantes para que descubran lo que esta «ahí fuera», sino, en realidad, el descubrimiento de lo que hay dentro de sus propias mentes».

Se puede concluir en que existen dos constantes en la didáctica y ejercicio del dibujo a lo largo de la historia artística: la petición del desarrollo de la observación y el uso de paradigmas y modelos. El binomio memoria-observación incluye dos elementos que, aunque han sido constantes en la historia del dibujo, nunca fueron considerados como recursos coordinados: uno no puede separase del otro. Se necesita una observación minuciosa del dibujante para incorporar, modificar o enriquecer un esquema.

Por otro lado se busca que alumno y el maestro identifiquen juntos habilidades y el uso de recursos específicos como:

1. Memoria visual: consiste en que el alumno pueda recordar la mayor cantidad de información visual.

2. Sintaxis: se refiere a la estrucutura y composición. Si el alumno logra situar los elementos en relación a otros, basado en el conocimiento y aplicación de métodos de dibujo (ejes, encuadres, dibujo de contorno o mapeo de sombras, geometrización, estructuras con volumen, figura de alambre, etcétera).

3. Trazo: demuestra el dominio del alumno en su capacidad psicomotriz; es evidente en el desempeño de su dibujo en la seguridad y soltura en el trazo, es visible en el peso de línea sobre la superficie.

La estrategia se refiere a considerar el proceso de construcción que se desarrolla particularmente en el bocetaje; al desarrollo de un proyecto particular para el cual se requiere de una estrategia de dibujo. Se entiende así que la estrategia del dibujo para el diseño no es el dibujo en sí, sino el proceso de visualización plasmado en el trazo.

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