Todo diseño es fruto del amor
Solo se diseña en la expectativa de aportar al otro.
AutorEmmanuel Calvo Canossa Seguidores: 6
- Opiniones:
- 33
- Votos:
- 25
Este texto es mi respuesta al artículo «El lucro distorsiona el buen diseño».
No hay que confundir «lucro» con «usura». Lo primero, idealmente, siempre será el reconocimiento monetario proporcional y adecuado al servicio brindado, dentro de unas bases contractuales bien establecidas por la partes arregladas. La segunda, es un exceso, siempre injustificado, un ingreso plus valorizado por una labor, que en la proporción relativa, siempre será de menor cuantía y calidad.
La «usura» desvirtúa la ética fundamental y necesaria de las labores proyectuales, a un punto que lesiona o pone en duda la mística individual que ha llevado a una persona a dedicarse a los oficios del Diseño.
Gui Bonsiepe («Diseño en la Periferia»), propuso un enfoque de la génesis psico-afectiva del objeto diseñado (artesanía) en las culturas precolombinas y por sus descendientes, que derivaba del concepto de la donación amorosa, de la interrelación equitativa de agentes que se «sabían» en dignidad, el uno y el otro. Ese enfoque definió, como canal teórico, lo que para mí es la identificación ideológica de mi vocación, en un contexto de economía periférica y latinoamericana.
Mucho canje se ha realizado en estas décadas de oficio, que por sobrio y enfocado es casi subrepticio. Buenas han sido las épocas en que por las condiciones del proyecto, se ha requerido de cobrar los honorarios periódicamente, casi como un salario; y mejores aun las oportunidades en que los servicios prestados se han ejercido en apoyo y promoción de instancias de carácter humanista y espiritual. En todos esos escenarios he lucrado, y cualquiera lo haría con justicia, unas veces financieramente y las otras en lo espiritual, lo profesional; siempre he tenido alguna ganancia.
El tema propuesto por Santiago Williams en «El lucro condiciona el buen diseño», ronda sobre la respuesta ética, conveniente, del las gentes que realmente ejercen su vocación como oficiantes proyectuales, ante las condiciones socio- económicas de un mercado periférico aun imbuido en una red globalizada. Sinceramente no me parece que lo desarrolle con la suficiente profundidad y estilo, pero se le agradece el llamar la atención sobre el tema que, eso sí, nos incumbe a todos ofertantes y demandantes.
Recomiendo con gran gusto la Carta «Caritas in Veritate»1 de Joseph Ratzinger (Benedicto XVI) que representa con sobrada maestría una aproximación al equilibrio fundamental, para la dignidad de toda persona, entre el ejercicio ético y el ejercicio del amor.
Todo diseño es intrínsecamente un fruto del amor; pues sólo se diseña en la expectativa de aportar al otro. Para quien diseña «el otro» siempre es su punto de interés, cómo percibe, cómo piensa, qué le agrada, cuánto es suficiente; todas son las preguntas de la persona enamorada.
Para terminar: no hay que confundir «amante» con «meretriz».
¿Qué te pareció? ¡Comparte tu opinión ahora!
- Opiniones:
- 33
- Votos:
- 25
Este video podría interesarte👇👇👇
Colabora con la difusión de este artículo traduciéndolo
Traducir al inglés Traducir al italiano Traducir al portugués- Texto en español en el Sitio del Vaticano.
Este artículo no expresa la opinión de los editores y responsables de FOROALFA, quienes no asumen responsabilidad alguna por su autoría y naturaleza. Para reproducirlo, salvo que estuviera expresamente indicado, por favor solicitar autorización al autor. Dada la gratuidad de este sitio y la condición hiper-textual del medio, agradeceremos evitar la reproducción total en otros sitios Web.