Diálogo Nº 41592
Diálogo iniciado en el artículo Qué vendemos los diseñadores
Esta anécdota deja muchas enseñanzas: Primero, a saber escuchar. Sea lo que sea que vendamos no lo podremos vender si no escuchamos las necesidades de otros.. si realmente el cliente necesita de lo que vendemos. Segundo, el valor del tiempo. Si es verdad que, por justicia, debemos cobrar según el tiempo que nos lleva, pero también se deben considerar otros aspectos para poder poner un precio justo a nuestro trabajo.