La importancia de la insatisfacción en el proceso creativo

Ingenuo el diseñador que espera encontrar un trabajo donde le paguen por hacer crítica. El principal insatisfecho debe ser uno mismo con la propia creación, no el cliente.

Julio Broca, autor AutorJulio Broca Seguidores: 17

Erika Valenzuela, editor EdiciónErika Valenzuela Seguidores: 62

Ante la impotencia cotidiana de vivir bajo reglas, discursos falsos y la sensación permanente de estar siendo juzgados, optamos por fugarnos. Ese escape es una negación, un rechazo a lo que nos rodea, es un momento de plena autonomía en el que nos despegamos del suelo y decidimos volar. Aunque ese vuelo sea simplemente un salto momentáneo, lo disfrutamos como un instante eterno. Ese instante, esa fuga que requiere inevitablemente de una acción de autonomía, es también el instante del acto creativo.

Es imposible encontrar a las musas estancados en la satisfacción, en la autocomplacencia, en el reciclaje constante de ideas ajenas —aunque «nada viene de la nada»—. Si bien es cierto que el diseñador está obligado a conocer, a imitar, a reinventar ideas —mímesis lo llaman los filósofos—, también es cierto que solo la insatisfacción constante nos permite cuestionar los límites del propio saber, del propio oficio, del propio orgullo. Por no decir que, de la falta de cultura y el exceso de soberbia, solo pueden emerger estupideces y disparates —muy respetables también—.

La autonomía es, por definición, moverse sin dependencia; un acto de negación del orden establecido —según la perspectiva autonomista de la sociología—, un proceso del que emerge una forma crítica a lo que nos rodea. Ese desear la autonomía, la energía anímica del arte y de las rebeliones —por no decir las revoluciones—, es la energía que impulsa a los marginales del arte que años después son comprendidos a cabalidad como es el caso de los impresionistas, de los dadaístas, de los expresionistas, etc.

Autonomía y creatividad son binomio que asegura la autenticidad. En su fusión nos encontramos nosotros intentando materializar la belleza de la verdad y cuestionar la deformidad de la mentira. Sentirse creativo sin transpirar autonomía es tan absurdo como sentirse autónomo sin transpirar creatividad.

«Primero ser para después crear».

José Martí

Cuando hacemos un análisis reflexivo, autocrítico, nos damos cuenta de en qué pequeña medida nosotros «somos» lo que deseamos ser y en qué gran medida «somos» lo que se nos han impuesto ser. Avanzar a la construcción de nuestros sueños, nuestros anhelos, solo es posible por el ejercicio creativo, desafiante de un mundo, de un sistema y de un yo que parece cerrar las puertas a lo nuevo, a todo aquello que lo contravenga, a todo aquello que se burle del dinero. Pero hoy, ante la miseria del arte, de la política, de la economía, de la ciencia, no hay otro camino que la inventiva y esto se desarrolla siempre a contrapelo del orden establecido.

Pensemos, por ejemplo, en los diseñadores industriales. Podemos dividirlos en dos grandes grupos antagónicos de creativos: unos diseñan en base a las necesidades industriales del sistema de producción y consumo (en este caso la creatividad es eficiencia), el otro grupo que se esfuerza por reciclar la irresponsable producción de basura que la industria genera para sostenerse, logrando que ese intento evidencie el absurdo de ese mismo sistema (en este caso la creatividad es crítica). Otro arquetipo que tenemos son los diseñadores de los políticos que crean campañas que objetivan necesidades muchas veces falsas, que se contraponen a los necios que señalan en las calles esa falsedad —o más bien su verdadero sentido—, ya sea con un sticker anónimo, un stencil o en un vídeo de Youtube. Hablamos de metáforas potentes capaces de detonar de forma crítica la verdad. Nadie paga por esos proyectos que contravienen el orden establecido. Esperar el trabajo ideal para ser crítico es un mal pretexto para no hacer algo con nuestra libertad, con nuestra insatisfacción con un mundo que en algunas partes huele a podrido. La auténtica creatividad no tiene que ver con la ganancia monetaria como fin (aunque nadie vaya a rechazar un buen pago por una buena idea, por supuesto).

El salto al vacío que supone la autonomía comenzó cuando nuestros padres arquearon las cejas incrédulos al escuchar nuestro mejor disparate: «papá quiero estudiar diseño» —te vas a morir de hambre—, y no se nos ocurrió lo espantoso de que tuviesen razón, incluso nos indignó su falta de sensibilidad (yo aprendí a sembrar, por si las dudas).

Los grandes creativos reconocen que sus mejores creaciones provienen de ningún encargo, de ningún cliente, solamente provienen de su búsqueda, de su insatisfacción, su hambre constante de transgredir lo establecido y de agudizar la mirada para ver ahí donde no se puede ver nada. Después, si lo logran, esa nada trae ante nuestros ojos cosas que por el momento nadie comprende o valora y además nadie paga. Esta búsqueda arriesgada no es posible para el que teme al fracaso, o para quien se encuentra paralizado por el temor a decir algo erróneo, que dicho sea de paso, además huye de su propio impulso de ser autónomo.

Resguardar los sueños sacándolos a la luz, alimentar la rebeldía, significa alimentar las fuerzas que mantienen viva la creatividad; que solo puede florecer en la autonomía y la autonomía puede ser nuestra noche solitaria, nuestra tarde «sin quehacer», nuestros momentos de paz, nuestro rechazo a una tarea estúpida. Esos rechazos nuestros son territorios fértiles para fundar nuestro espacio de autonomía personal, un espacio que al compartirlo con otros, va formando un territorio libre, un mundo de arte perseguido por la huella de nuestra insatisfacción.

¿Qué te pareció? ¡Comparte tu opinión ahora!


Opiniones:
12
Votos:
43

Este video podría interesarte👇👇👇

Colabora con la difusión de este artículo traduciéndolo

Traducir al inglés Traducir al italiano Traducir al portugués
Código QR de acceso al artículo La importancia de la insatisfacción en el proceso creativo

Este artículo no expresa la opinión de los editores y responsables de FOROALFA, quienes no asumen responsabilidad alguna por su autoría y naturaleza. Para reproducirlo, salvo que estuviera expresamente indicado, por favor solicitar autorización al autor. Dada la gratuidad de este sitio y la condición hiper-textual del medio, agradeceremos evitar la reproducción total en otros sitios Web. Publicado el 08/05/2014

Descargar PDF

Debate

Logotipo de
Tu opinión

Ingresa con tu cuenta para opinar en este artículo. Si no la tienes, crea tu cuenta gratis ahora.

Retrato de Erik Ledesma
1
May. 2014

En un principio nadie va pagar por proyectos enfocados a nuestros ideales personales (ya sean de índole comercial o no), pero si el proyecto cubre alguna necesidad real este dará algún resultado. Buscar la satisfacción en el cliente es un error común, ya que los valores del cliente no son los nuestros, este no siempre juzga de manera justa (y a veces el cliente ni si quiera queda conforme con sus ideas). Ante todo esto lo mejor es encontrar nuestra misión en la vida la cual nos brindara automotivación, lo cual otorga indecencia por que la motivación no proviene de afuera si no de adentro.

0
Retrato de Julio Broca
17
May. 2014

De acuerdo. Hay una relación de ida y vuelta entre al afuera y el adentro, entre el cliente y el diseñador. Dar la justa dimensión a esta relación implica claridad en lo que deseamos. Afortunadamente, entre un buen cliente, uno culto y un buen diseñador, uno culto, siempre hay un acuerdo que no necesita palabras: la calidad, dicho en otras palabras, lo bello y lo útil.

1
Retrato de Erik Ledesma
1
May. 2014

Si, la congruencia empieza por uno mismo, y tal vez después podamos encontrar clientes con ideales similares. Yo cometí el error de no entender esta profesión y de buscar la satisfacción en motivos externos. Lo cual me llevo a dejar de ejercer, por eso hago especial hincapié que para obtener la satisfacción y éxito hay conocer lo que uno quiere y lo que la profesión realmente puede ofrecer. También uno debe estar dispuesto a pagar el precio, arriesgarse y ser paciente. Buen Articulo.

0
Responder
Retrato de Oscar Blanco
4
May. 2014

Metiendome en dirección de una tangente.

Los diseñadores industriales en a mi criterio se mueven en dos principales corrientes:

Aquellos que se apegan a la obsolesencia programada como su principal motor. Lo mas importante en la sociedad de consumo, es que las cosas fallen en un tiempo pre-determinado.

Y estan los que se enfocan mas en la experiencia del usuario y sus necesidades, sin embargo, estos tambien trabajan con la sociedad de consumo, pues es cuando se establecen modas y obsolesencia en base a uso y apariencia.

Los que trabajan con conciencia verde, esos no forman parte del sistema.

1
Retrato de Julio Broca
17
May. 2014

Digamos que los que trabajan con conciencia verde están también en el sistema pero a contrapelo, desde lo que producimos como basura ellos generan una posibilidad distinta. Estoy de acuerdo contigo Oscar.

0
Responder
Retrato de Lady Alcívar
1
Dic. 2019

Me veo en la obligación de decir que me he sentido identificadísima con el párrafo en donde narras la reacción de nuestros padres (aún más cuando desconocen esta profesión) frente a la convicción de querer convertirse en diseñador gráfico, jaja...

En cuanto al resto del artículo, estoy de acuerdo con esa "insatisfacción" constante que deberíamos mostrar las personas creativas. Ese afán de no conformarse y de estar en continuo cuestionamiento de lo observado, sugerido y en el peor de los casos impuesto.

Comparto también tu idea de que los grandes proyectos no siempre son aquellos por los que alguien se atreve a arriesgar un centavo y por ende nos convertimos en nuestros propios inversores. Creo que en general los creativos somos seres inquietos y con una tendencia muy marcada a la insatisfacción, que finalmente termina siendo nuestro motor.

0
Retrato de Danny Saucedo
0
Danny Saucedo
Ago. 2019

Me parece muy interesante este artículo, la autonomía de la que habla, la insatisfacción personal y creatividad que cada persona desarrolla para la superación y para impulsar la autonomía propia.

0
Retrato de Jazmin Navarrete
1
Jazmin Navarrete
May. 2015

Yo creo que si tienen valor los proyectos personales, no se encuentra gente con los mismos gustos, cierto, pero al ser nuestra creación se vuelve arte o artesanía y entonces tiene un precio que el cliente puede apreciar con valor estético o funcional. Crear es un derecho que nos podemos dar, usemoslo como pretexto si ya todos los días trabajamos en el área cretiva.

1
Retrato de Ivachigo Neko
0
Ago. 2014

En la época actual donde vivimos en donde la gran parte de las ideas ya a sido usada y los diseñadores se ven forzados a seguir una linea para poder funcionar y no tanto destacar, se necesita de personas creativas con la iniciativa de romper el molde del diseño convencional. Claro todo esto debe realizarse de una forma cociente tanto complaciendo al cliente como haciendo algo funcional que logre impacto.

Por ultimo pensar en la autosatisfaccion y autosuperacion creativa, pero, dándose cuenta del riesgo que se puede tomar al utilizar eso como el enfoque para el diseño.

1
Retrato de Shalom Suarez
1
May. 2014

Ya que nosotros diseñamos para el cliente, y no para nosotros mismos, creo importante la autocrítica para el mejoramiento personal, pero unicamente esto. Si creo debes estar satisfecho con tu trabajo antes de entregarlo al cliente, pero porque cubre las necesidades del mismo, no las propias.

1
Retrato de Esther Analí Beltrán Meza
2
May. 2014

Considero que la insatisfacción debe ser personal en cuanto a que nos cuestionemos todo el tiempo si lo que estoy haciendo será lo mejor para la empresa del cliente?? lo que decidí es realmente lo mejor que puedo hacer? Creo que la auto crítica es indispensable en una labor como la nuestra donde no hay bien o mal, y es por esa misma razón que se da el fenómeno de criticar el trabajo de un colega y asumir que se pudo haber hecho mejor.

1
Retrato de Livier Mendez
2
May. 2014

Yo creo que más que insatisfacción, es inseguridad, en gran parte porque nuestro trabajo es juzgado y gran parte de ese trabajo nos representa, porque forma parte de nuestra manera de pensar y ver las cosas, pero por otro lado, debemos dejar de lado los tabús sobre como debemos comportarnos como diseñadores. Saludos!

1

Te podrían interesar

Próximos seminarios online

Seminarios de actualización para especializarte junto a los que más saben

Estrategia de Marca

Estrategia de Marca

Claves para programar el diseño de símbolos y logotipos de alto rendimiento

20 horas (aprox.)
1 mayo

Tipología de Marcas

Tipología de Marcas

Criterios y herramientas para seleccionar el tipo adecuado al diseñar marcas

15 horas (aprox.)
1 mayo

Branding Corporativo

Branding Corporativo

Cómo planificar, construir y gestionar la marca de empresas e instituciones

20 horas (aprox.)
1 junio