Creatividad devaluada
Cómo hacer valer la creatividad en diseño gráfico.
AutorRicardo Velázquez Seguidores: 14
EdiciónGreta Sánchez Seguidores: 76
- Opiniones:
- 81
- Votos:
- 101
Un día de tantos, cuando caminaba por las calles de una gran ciudad, me encontré con varios letreros que ofrecían servicios de impresión. Lo que más me atrajo es lo que estaba en letras grandes y con un globo para llamar la atención: «Diseño Gratis». Me quedé pensando: «¿tan devaluado está el diseño gráfico en la actualidad?, ¿de verdad hay que regalar la creatividad para vender?».
Revisando publicidades en las redes sociales, en revistas y medios en general, en efecto me he llevado la gran sorpresa de que están regalando la creatividad. Pienso que a quienes lo anuncian no les ha costado desveladas, llanto, malas o buenas calificaciones, retos, desafíos, pelearse con el profesor de la clase, poder tener una carrera de diseño gráfico. Al final, cuando nos contratan en un estudio de diseño, el jefe o dueño de la empresa, en su afán de vender más, simplemente «regala» la creatividad.
Cuando uno busca empleo en México, una de las profesiones más devaluadas es precisamente la de diseñador gráfico, una carrera tan cara como arquitectura o ingeniería. Sin embargo menos apreciada y valorada. ¿Qué estamos haciendo para poder tener ese valor de mercado? La creatividad no se da en árboles o macetas, la creatividad implica ideas fluyendo y plasmándose en cualquier elemento gráfico. Es lo que vemos en televisión, en folletos, revistas, y otros soportes visuales.
¿Qué estamos haciendo los diseñadores al respecto?, ¿y las agencias de publicidad? ¿Por qué devaluar la creatividad al punto de regalarla?, ¿qué vamos a hacer? Somos los diseñadores gráficos quienes tenemos la mayor responsabilidad. Cuando en el año 2000 inicie mi negocio, también cometí el gran error de regalar la creatividad, pensando que así atraería a más clientes, sin darme cuenta en aquel entonces de que el cliente está dispuesto a pagar por el diseño, aunque lo que le urge es el material, la pieza producida, sea en papel, lona, vinil, etiqueta, tela, etc.
En la entrada de las tiendas debería haber un letrero que diga, «las etiquetas no se regalan», «tampoco la creatividad». Desde aquel error cometido al inicio de mi carrera, siempre he cobrado el diseño, y lo cobro caro, porque considero que ese es el valor de mi creatividad. En todos los casos el cliente paga, sin objetar. Salvo en una ocasión en la que un cliente me dijo la clásica frase «¿por qué me cobras, si solo son dibujitos?». A ese cliente no le quedaron ganas de volver a cuestionar la creatividad.
Ojalá en mi país los colegas diseñadores no se olviden que también deben cobrar la creatividad.
¿Qué te pareció? ¡Comparte tu opinión ahora!
- Opiniones:
- 81
- Votos:
- 101
Este video podría interesarte👇👇👇
Colabora con la difusión de este artículo traduciéndolo
Traducir al inglés Traducir al italiano Traducir al portuguésEste artículo no expresa la opinión de los editores y responsables de FOROALFA, quienes no asumen responsabilidad alguna por su autoría y naturaleza. Para reproducirlo, salvo que estuviera expresamente indicado, por favor solicitar autorización al autor. Dada la gratuidad de este sitio y la condición hiper-textual del medio, agradeceremos evitar la reproducción total en otros sitios Web.