Sánchez Mercado sobre No me des lo que te pido, dame lo que quiero (44591)
Diálogo iniciado por Joaquín Eduardo Sánchez Mercado en el artículo No me des lo que te pido, dame lo que quiero
Aquí se podría decir: ¿son los diseñadores quienes resuelven "problemas" a sus clientes, o son los clientes los que resuelven los problemas económicos de los diseñadores. Cuántas pláticas, cuántos artículos sobre cómo investigamos, que la utilidad, la racionalidad, el diseño cuasi científico, para terminar con que los caprichos del cliente al final se imponen porque ellos son los que pagan. Solo en contados casos es el diseñador quien no permite que el cliente defina el diseño. Generalmente quién menos necesidad económica tiene, puede darse el lujo de rechazar los caprichos del cliente. Generalmente se recurre a las grandes empresas de publicidad o diseño porque necesitan un nivel muy alto de creatividad y profesionalismo. No van a decirte que hagas tal o cual cosa, sino a que tu les digas como, cuando y donde. Es en el tianguis donde se suele regatear y no sucede tanto en los almacenes de lujo. Los perros huelen el miedo y los clientes la necesidad.
Hola Joaquín, no se puede expresar mejor que como tú lo has dicho, estoy completamente de acuerdo con lo que dices. Gracias por tu comentario
¿Los clientes son los que nos resuelven los problemas? Yo pensaba que ambas partes recibíamos un beneficio mutuo por el intercambio. Seguir pensando así no nos sacará del hoyo. Lo que conseguirá es volvernos conformistas y hasta verlo bonito. Tal vez suene arrogante, pero a mí me ha ido bien en el Diseño y creo que encontré la manera de hacérselo ver a mis clientes.
¿Aceptamos por hambre? ¡por qué poco vendemos nuestra dignidad!
¿Qué hacemos entonces? ir en busca de clientes que aprecien nuestro trabajo. Hay muchos más de los que creemos.