Balcázar sobre Crisis del diseño gráfico en México (26282)
Diálogo iniciado por Mario Balcázar en el artículo Crisis del diseño gráfico en México
Dedicarse a la docencia como solución a la falta de competitividad es algo que afortunadamente las universidades han comenzado a vetar. Es mi segundo post sobre este articulo porque creo es realmente un breviario de lo que algunos diseñadores piensan sobre la profesión. Sin duda alguna para tomar en cuenta y agradecer no pertenecer a grupos de colegas con una opinión tan mala y mediocre de nuestra profesión. Yo sigo diseñando, enseñando y ganándome la vida en ésto.
Mario, sin ser mexicano, ni diseñar en México como Mateo o tú, y con la admiración de siempre, pienso que el (para ti) mal artículo, te permitió expresarte con energía; como señalaba en un post de Gabriel, las afirmaciones o negaciones generales son injustas casi siempre (de hecho a la realidad no le pasa nada por más que cacareemos, tú yo, o quien quiera, somos nosotros quienes cambiamos o no), considero que con su texto Mateo aporta al ecosistema de pensamiento, ya ves, mi reflexión sobre tu reflexión sobre la reflexión de él, y ¡voila! otro peldaño en nuestra construcción conjunta. Saludos.
Me parece que este artículo es mejor que el tuyo sobre Jobs. Así como tu externaste tu parecer yo también lo hago. No para agredir sino para demostrar que tan fácil es denostar. Creo que si te motivó a expresar tu opinión, por eso solamente ya valió la pena lo publicado. Aquí no se han dicho mentiras, son situaciones que muchos han pasado y seguirán experimentando, además son hechos históricos innegables y más desde la perspectiva del interior de México donde las oportunidades de trabajo no son tantas como en la capital de la república Cada quién cuenta su historia según le fue en la guerra
De total acuerdo en la apertura del debate que se ha provocado. Efectivamente cada opinión es debatible y creo no hay un solo artículo en en FA que le haya gustado a todos. Para mí es un mal artículo por lo dicho anteriormente y lo digo de la misma forma con la que acepto las críticas hacia mí o mis artículos. Lo que sí lamento son las generalizacions a partir de hechos tan pobremente sustentados; un punto de vista que rebaja indiscrimidamente a las universidades como escuelitas y a los diseñadores mexicanos como mediocres, elististas y sin compromiso por nuestra profesión.
No son pobremente sustentados, es muy corto el espacio aquí para aportar datos probatorios, pero en términos generales, en las universidades que conozco si veo muy serias deficiencias. En una universidad privada se contrató a diseñadores de una universidad estatal (entre ellos a mí) porque no confiaban en sus propios egresados, aducían que salían llenos de teorías y no podían con el trabajo por no tener suficiente habilidades. En otra universidad privada se obligó a un maestro a aprobar a un alumno que no habia asistido ni trabajado lo suficiente, lo amenazaron con correrlo si lo reprobaba.
Como lo has escrito Joaquín, hablamos del baile, según como y con quien bailamos, «chespiritescamente» (tal vez,quizás,acaso,a lo mejor, de repente, quien sabe) tu recorrido, o tu experiencia por el mundo académico del diseño mexicano, indica una cosa sin embargo otras experiencias dentro del diseño mexicano y en el de otras partes señalan otras cosas...por principio el diseño, según lo enfoco atiende más a la particularidad que a la generalidad; además, ya sabes como a los latinoamericanos nos afecta aquello de todos los mexicanos son, todos los argentinos son, todos los colombianos son....
Si, tienes mucha razón, a veces generalizamos lo que es experiencia personal y lo trasladamos al ámbito nacional o lo que es peor a lo internacional. Pero la exageración lleva la intención de explicar mejor un punto de vista, hacerlo más perceptible. También se puede notar que en los comentarios que ponemos en foroalfa sale a la luz la problemática de cada quién y su entorno. Y ya en suma total vemos que en mucho se coincide, aun en países diferentes. Es casi como terapia mental, como autoanálisis. Quizá viéndonos en este espejo nos sirva para conocernos mejor y encontrar soluciones personales
De acuerdo, la exageración tiene algo de caricatura, y ya ves como los caricaturistas en la prensa han sido, en ocasiones, impulsores de cambios mayores que los propios editorialistas.