Balcázar sobre Redefiniendo el diseño editorial (42607)
Diálogo iniciado por Mario Balcázar en el artículo Redefiniendo el diseño editorial
El problema de definición no es nuevo. Desde la incorporación de la computadora no se sabía a ciencia cierta cuándo deja de ser un folleto y se convierte en un libro. Ante los cambios que se dan en el diseño editorial —en este caso— comenzamos por meter todo el nuevo conocimiento en un solo término y con el tiempo comenzarán a encontrarse los específicos, en la misma medida que sucederá con quienes se dedican a ello. Creo que estamos en una fase muy temprana aún.
No se de que tiempo estás hablando, antes de las computadoras de escritorio había los tipos móviles, el linotipo, las IBM composer, las Varitype o de papel fotográfico y claro que se sabía lo que era un folleto o lo que era un libro. Parece que hoy en día se cree que todo inició con las computadoras de escritorio, o que todo se hizo nuevo y no es así, la computadora solo hizo la vida más fácil e hizo posible alcanzar nuevos medios y nuevas modalidades. Tal vez mayor perfección (mayor exactitud). Antes de los setentas u ochentas ya había muy buena calidad. Había offset a 500 lpp.
La UNESCO define el libro como todo impreso —excepto el periódico— que rebasa las 49 páginas. A mí una vez me regalaron un libro de 40 páginas (un cuento). ¿Eso entonces ya no es un libro? ¿O un catálogo de Liverpool de 60 páginas ya es un libro? También la definición afirma que el libro está compuesto mayormente por texto, ¿entonces un libro de fotografía mayormente conformado por imágenes no es un libro? Las computadoras cambiaron muchas cosas en el diseño editorial y aceleró el cambio en otras que venían evolucionando, creo que efectivamente hay un antes y un después-
Totalmente de acuerdo con Mario. Las computadoras marcaron un antes y un después en diseño editorial hace dos décadas. Hoy nos enfrentamos a un nuevo cambio, probablemente mucho más radical.
Definitivamente el cambio es más radical, porque en un libro o revista impreso tradicional hay "estándares" en el mercado: materiales y técnicas de reproducción/encuadernado. Como lector sólo se te permite hojear y descubrir algún suaje. Hoy en el mercado digital no existe un "estándar", en otras palabras, adoptar un sistema o plataforma te cierra otras puertas. Hay otras formas de navegar, lo audiovisual es posible y la interactividad es mayor. Consideremos que en un impreso nunca se le dió al lector la posibilidad de ¡Cambiar la fuente tipográfica!, hoy algunas plataformas lo permiten.