Diálogo Nº 36466
Diálogo iniciado en el artículo Yo trabajo por el pancho y la Coca
El principal problema del Diseño Gráfico es, según mi criterio, el desconocimiento real de las pertinencias de la profesión, y por lo tanto, el desconocimiento de cómo valuarla en el mercado. La indefinición impide una negociación en la que el profesional reciba el pago que merece por los beneficios que aporta. Todos queremos, porque necesitamos, el dinero, queremos lo mejor por el menor costo posible. Hay que dejar de llorar y aprender que el diseñador no debe ser un bohemio, debe entender perfectamente el negocio, el propio y el del cliente.
Como la experiencia me lo a demostrado el dinero siempre esta cuando el trabajo se hace a pulso y logra como mínimo llenar las expectativas de los clientes u o jefes, falta ver si en la mayoria de los casos no es la mediocridad u o conformismo en la profesión lo que limita las posibilidades.
Más allá de la seriedad o pasión que se le ponga a determinado proceso creativo, está la cuestión económica. Uno puede ser un excelente profesional y fallar al momento de «tasar» un trabajo. Los clientes, siempre se quejarán por un costo elevado, nunca por un costo bajo, sobretodo si el costo es menor a la calidad del trabajo entregado. Los Colegios Proofesionales, son entidades que tienden a aunar criterios tanto del ejercicio como del valor de un producto terminado, derivando la elección por un profesional u otro a los clientes.
A diferencia de otras profesiones, es muy difícil mesurar el trabajo que implica cada proyecto. En arquitectura, por ejemplo, son m2, pero principalmente en web, es difícil concertar un criterio. En mi caso, la experiencia me permite calcular las horas que me llevará cada proyecto, por lo que al tener un valor-hora, puedo presupuestar rápidamente. Hay que tener en cuenta muchas más variables que las que la mayoría consideramos al inciar la práctica profesional, desde impuestos hasta lo que cuesta la medialuna del desayuno.
Frase escuchada durante una visita de estudiantes a importante agencia de publicidad Argentina... Año 1989... «Si a los 40 años no ponés tu propia agencia de Publicidad, sonaste, para la agencia creativamente estas quemado»... Lapidario, no? Vean cuanta gente del gremio publicitario se cortó sola y puso su propia agencia o es freelance... Complicado el tema.
El diseño gráfico no se queda en lo publicitario, es una fuerte vertiente especialmente en latinoamerica, pero por suerte la publicidad depende mas del diseño que nosotros de ella. El tema es diversificar y encontrar en que area se tienen mayores fortalezas, aunque tiende a ser cierto que a los 40 un buen profesional del diseño es socio en una agencia o tiene su propio negocio.
