Sánchez Mercado sobre Los clientes no compran diseño (44808)
Diálogo iniciado por Joaquín Eduardo Sánchez Mercado en el artículo Los clientes no compran diseño
No me ha gustado nunca es la palabra "problema", aunque reconozco que tiene varios significados y se denonima problema incluso a operaciones matemáticas, etc., pero me resisto a ver a los diseñadores como supehéroes que se dedican a resolver los problemas de la gente. ¿Alguien tiene un problema? y un super diseñador va al rescate. ¿Si alguien necesita algo, se puede decir que tiene un problema? Tal vez tener en mente un proyecto o una necesidad de comunicar algo se pueda llamar problema, pero al menos no es como el ejemplo que nos ponen aquí. Ir al dentista cuando ya tienes una serie de caries, si puede ser un grave problema, pero un problema deja de serlo cuando la solución es relativamente sencilla. Si un incendio empieza y se puede apagar con un bote de agua, realmente no considero eso un problema. El que no lo pueda apagar sí. Me molesta esa visión negativa del diseñador apagafuegos. Yo veo al diseño como aportar proyectos, ideas creativas, no la visión negativa del superhéroe.
Joaquín, yo jamás tuve una visión del diseñador como imprescindible. La prueba es que muchas organizaciones funcionan perfectamente sin diseño o con el trabajo de diseñadores muy malos.
Respecto a «problema», tal vez podríamos usar la palabra «necesidad», que deja fuera la idea de problema como «preocupación»; aunque seguramente también se podrán encontrar objeciones.
Creo que la idea de resolver problemas en diseño (problem solving) no es nada nueva y a esta altura todos tenemos muy claro de qué se trata. Entre el estado de gracia y los problemas o necesidades graves, hay un degradé de puntos intermedios; y los que resolvemos los diseñadores, por lo general son entre sencillos y medianamente sencillos, pero lo suficientemente complejos como para que nos necesiten.
Ciertamente es así y lo tuve presente desde el principio, pero sigue sin gustarme ese enfoque, sobretodo por los que lo expresan a cada momento y lo usan para todo. Me pareció un ejemplo extremo la comparación con el dentista, así como muchos lo comparan con el médico. Yo no pienso que todos los clientes tengan necesidad de resolver un problema y muchas veces ni siquiera es necesario que hagan tal o cual cosa, o que si dejan de hacerla tendrán graves consecuencias, pero más que necesidad si pueden tener un deseo, un proyecto, un fin y el diseñador le puede ayudar a lograr esa meta, porque en todo caso, son los clientes los que nos resuelven a nosotros nuestra sobrevivencia. Diseñadores resuelven los problemas del cliente y el clientes resuelve el problema. Se tiende a pensar que la publicidad la hacen los diseñadores gráficos pero son las agencias de publicidad y nosotros hacemos la parte gráfica.
Estoy algo de acuerdo con Joaquín y algo con Luciano. Yo evito usar la palabra problema y les explico a los alumnos que no son problemas de diseño. Es una palabra pesada. Pero en ocasiones, como dice Luciano, si se trata de resolver verdaderos problemas.
En el asunto de la analogía con el dentista, yo observaría que uno no debería ir al dentista a que le quiten el dolor. Antes así se acostumbraba y por eso se les conocía como "sacamuelas". Ahora debe haber una cultura de prevención, mantenimiento y alivio en situaciones necesarias. Así debería ser el diseño...
Pienso que si es importante que los dentistas o médicos expliquen al paciente sus situaciones, como lo van a hacer y si es importante saber que estudios o experiencia tienen. Si no tengo todo claro me voy con otro médico (o diseñador). Eso pienso por experiencias propias. El cliente y el paciente pagan.