Diálogo Nº 30427
Diálogo iniciado en el artículo Ayer aprendíamos de las personas, ¿hoy de las máquinas?
No debemos sorprendernos por los nuevos adelantos tecnológicos, los diseñadores no serán mejores diseñadores por esos cambios. Decir que los diseñadores de hoy son mejores que los de ayer, o que los seres humanos de hoy somos mejores que los del pasado, no me parece que sea así. La tecnología no es ni buena ni mala, todo lo que tiene posibilidades para lo bueno, la tienen para malo. La energía atómica si la usamos bien, nos será de utilidad y si la usamos mal nos traerá graves perjuicos, todo depende de como la usemos. Igual pasa en diseño, si nos sirve para mejorar nestro trabajo será buena.
En esto si estamos de acuerdo.
El artículo tiene ese tufo de nostalgia por tiempos perdidos que supone que el trabajo con los nuevos medios carece de satisfacción, o que las nuevas generaciones «no saben lo que es abrir un CD» (¿?).
El mismo título es un sinsentido. Las máquinas no generan contenidos, sólo los distribuyen o almacenan.
Pero no podemos decir que la revolución industrial no tuvo sus consecuencias para mucha gente, así como la revolución tecnológica también. Hay muchos libros que hablan de estos cambios y sus consecuencias, no todo fue positivo. Creo que es válido este planteamiento.
Las consecuencias de la revolución industrial se debieron más que nada a la avaricia, la estupidez, la depredación y el egoísmo humanos; una máquina de vapor más eficiente no tuvo nada que ver. Es como decir que la imprenta de Gutemberg es la culpable de que se imprima pornografía.
Ese es mi punto, la tecnología no significa cambio profundo, quizá el entorno, la comodidad, la eficiencia, etc., pero no se puede decir que ya el ser humano es otro.
