Abbadie sobre Carta del diseñador al cliente (25915)
Diálogo iniciado por Ivan Abbadie en el artículo Carta del diseñador al cliente
una de mis frases y folosofía que he podido generar a lo largo de 10 años de experiencia es «en un proyecto de diseño es más importante trabajar para los clientes de nuestros clientes, es decir, para el usuario final», creo que cuando entendamos esto como diseñadores y lo sepamos transmitir a nuestros clientes las cosas podrán mejorar para todos, finalmente el trabajo se hace para los clientes de nuestros clientes, ¡saludos!
Por cierto, y siempre con ánimo festivo (amplio mi opinión arriba para burlar la tiranía del cuenta caracteres), entiendo que el debate entre Luciano y tú, que en principio no propició mi intervención (recuerda, fue la repetición continuada de la palabra «creo»), no está basado en argumentos contra sus mutuas personas, sin embargo, dudo que argumento alguno emitido por alguien pueda ser impersonal, siempre los veo personales (que no contra las personas), por eso refuto el lenguaje universalista lleno de frases como «a menudo se piensa que»,pues¿quien piensa en esa frase? ¿«eso»? Nuevo saludo.
alfredo, coincido y siempre he estado a favor de la amplitud de pensamientos, la subjetividad en esta profesión sabes que es parte de ella, sin embargo no por eso unos están bien y los otros están mal pero la imposición de un pensamiento como lo ha hecho luciano en varias ocasiones en este foro (del cual el forma parte importante) es en lo que no estoy de acuerdo, por ello insisto en que no es algo personal, si bien si se dirige a una persona es en términos profesionales y en cuestión de formas de pensar, agradezco tu continuidad al tema y sobre todo fortalecerlo, CREO que de eso se trata!!!
Gracias Ivan,no he experimentado «imposición de pensamiento por Luciano», pero no soy tú. De ser yo él, o de tú ser él, o si yo fuera tú, o si tú fueras yo, o si él fuera nosotros actuaríamos diferente. Como sea sólo Luciano es experto en ser él mismo. Y tú en ser tu. Y yo en ser yo. A veces opinamos con convicción, a veces la convicción estorba: Enlace Cuando lideramos proyectos (y lo digo por mí), casi inevitablemente tenemos «síndrome de anfitrión», nuestros valores permean la dinámica que proponemos y difícilmente será de otra manera...