Aburto Castellanos sobre Evolución y desvalorización de una profesión (29164)
Diálogo iniciado por Mario Aburto Castellanos en el artículo Evolución y desvalorización de una profesión
Hay un enfoque, Rodrigo, que creo se quedó fuera, el económico: en el ámbito de la escasez (no digital) el valor de cualquier disciplina aumenta (sin importar la calidad), y en el ámbito de la abundancia (digital) el valor de cualquier disciplina disminuye (sin importar la calidad). Un dato también histórico: el 3 de julio de 1886 (125 años) Ottmar Mergenthaler logró un modelo funcional de la máquina de Linotipia, antes de ello había cientos de miles de componedores de monotipia en imprentas y diarios (con sindicatos muy poderosos que permitían sueldos decentes para los antiguos diseñadores);
Esto es muy cierto Mario. En el caso de la ilustración, los ilustradores análogos compiten mejor (+$) con su trabajo manual, porque evidencia su destreza técnica además de la estructuración conceptual, mientras que en la ilustración digital al ser generalizada el uso de la informática, el costo de su trabajo se abarata (-$) pues el valor agregado se encuentra en el trabajo manual. Claro, como en todo, depende como te promuevas, el contexto en donde te desarrollos y el producto de tu trabajo, sea análogo o digital.
Te soy muy honesto Mario, no me entusiasma analizar la profesión en términos de oferta y demanda, pero sí te puedo decir ¿porqué pensás que en lo digital la oferta es mayor? Estamos en la era de la comunicación. Si hay algo que no falta es demanda de diseño. Con respecto a la valorización de los ilustradores (por hablar de algo «no digital»), salvo excepciones ellos sufren estos cambios más que nosotros.
Gracias por el dato histórico.
Sé que entusiasma poco pero ese análisis es algo fundamental. Cierto que hoy más que nunca la demanda de diseño es gigantesca, pero también es cierto que los sistemas informatizados permiten satisfacerla con mínimo personal: un sistema informatizado permite, por ejemplo, desde un punto operativo de una nación (la capital), elaborar cientos de ediciones periódicas (impresas) para cientos de ciudades con un equipo humano mínimo y menor de diseñadores (y luego para todo el mundo en línea, con el mismo equipo humano). Es un factor que no puede obviarse.