Isizan sobre ¿En qué consiste diseñar experiencias? (55430)
Diálogo iniciado por Daniel Isizan en el artículo ¿En qué consiste diseñar experiencias?
Considero que el artículo plantea un enfoque muy interesante sobre el diseño de experiencias, destacando que no se trata solo de crear productos o servicios, sino de generar las condiciones para que las personas puedan vivir experiencias memorables. Me parece clave cómo se explica la evolución de la economía, pasando de un modelo industrial a uno basado en la comercialización de vivencias, donde las experiencias se han convertido en el principal objeto de consumo.
Algo que me llama la atención es cómo el diseño y las experiencias están tan vinculados. Entiendo que el diseño no solo consiste en el producto físico, sino que también contribuye directamente a la construcción de la experiencia. Esto va más allá de simples estrategias de marketing, ya que las experiencias no son un añadido, sino una parte esencial del producto.
Valoro mucho las distinciones que plantea el artículo, especialmente la diferencia entre diseño como proceso y como resultado, así como la experiencia como algo intrínseco al diseño. Diseñar experiencias requiere una visión global que combine lo práctico, lo emocional y lo simbólico para conectar profundamente con las personas.
Hola mi nombre es Odalys Andráde En mi opinión , el comentario que plantea mi compañero Daniel es una perspectiva muy acertada sobre el diseño de experiencias, algo que considero fundamental en el contexto actual. Estoy totalmente de acuerdo con la idea de que el diseño no solo crea productos o servicios, sino que también establece las bases para que las personas vivan experiencias significativas. Esto resuena mucho conmigo, ya que creo que las experiencias se han convertido en el verdadero motor del consumo moderno.
Lo que más me hace reflexionar es cómo el diseño y la experiencia están profundamente conectados. No se trata de añadir algo emocional o simbólico al final del proceso, sino de integrar estas dimensiones desde el inicio. Esto cambia completamente la manera en que entendemos el diseño: no solo como una actividad funcional, sino como una herramienta para generar vínculos entre las personas y las marcas.
Me parece especialmente relevante la distinción entre el diseño como proceso y como resultado. Creo que esta visión más holística nos desafía a pensar en el diseño como una forma de crear conexiones humanas, no solo soluciones prácticas.