Fontanella sobre Diseño y nuevas reformas estatales en Cuba (43412)
Diálogo iniciado por Javier Fontanella en el artículo Diseño y nuevas reformas estatales en Cuba
Creo modestamente que el diseño en Cuba tendrá repercusión real el día en que la cultura del control y la fiscalización socialistas finalmente desaparezcan. La mayoría de los que aquí opinamos vivimos en países llenos de defectos pero paradójicamente con un marco más propicio para la intervención y la influencia del diseño y la innovación. Sucede con la isla que se le toma como referencia de la utopía de la justicia que se aplicaría a todas las esferas de la vida humana pero la realidad ha sido otra y hablamos ya de más de 50 años de experimentaciones, proyectos, legislaciones, etc.
Gracias Javier. Las dificultades que enfrenta un diseñador en Cuba y el atractivo de los espacios de creación en el extranjero han impulsado a varias generaciones de diseñadores cubanos a emigrar en busca de un ambiente más favorable a la creación. Ya a mediados de los ’90, tras la caída de la URSS el país había experimentado una apertura similar, y entonces parecía que el ejercicio del diseño en Cuba se reanimaría, pero la burocracia y los intentos de control impidieron este avance. Queda por ver si las leyes recién puestas en vigor favorecerán a la profesión y a los diseñadores cubanos.
De momento siento que estas leyes solo conseguirán mantener la profesión en la marginalidad. En los 80ʼs el diseño fué una política de estado -de ahí la creación del ISDI, la ONDI, eventos al efecto, etc) y fué digamos la época en que ese mundo podía "despegar socialmente" con las consabidas disposiciones gubernamentales pero al final eso no fructificó. Ha habido varias generaciones de diseñadores que terminaron marchándose ya no para hacer vida profesional sino por algo tan básico como concretar un proyecto de vida. Cuba hoy se va pareciendo más a un país normal pero queda un largo camino.
En Cuba la "política" y el «Estado" están involucradas en cada esfera de la vida. Volvemos al exceso de control. Ejemplo: la nueva base de datos que decide quiénes pueden diseñar en Cuba dicta que "por única vez, podrán inscribirse en el Registro aquellas personas naturales profesionales que no sean graduadas de Carreras de Diseño y las no profesionales vinculadas al diseño». Una comisión determina, a partir del portafolio del solicitante, si tiene la aptitud para el ejercicio de la profesión en Cuba. Esto excluye para siempre a los talentos no egresados del ISDI que puedan surgir más tarde.
"por única vez, podrán inscribirse en el Registro aquellas personas naturales profesionales que no sean graduadas de Carreras de Diseño y las no profesionales vinculadas al diseño» - Y es que es difícil no sentir preocupación cuando vemos este tipo de ideas. Después pueden venir -a discreción del Registro- otro tipo de restricciones, alguien puede pensar que un ente que te represente es algo bueno. Pero también crea serios obstáculos cuando no son entidades independientes o auto-gestionadas. La pertenencia a dicho ente presupone ya compromisos que no han sido declarados y que habrá que acatar.
Javier, el autor de este blog hace de este registro de diseñadores y expresa inquietudes semejantes a las tuyas: Enlace
Gracias Annick, ya lo revisé y si, coincido ampliamente con lo que refleja Carlos Alberto en su post. La intervención estatal y por extensión del partido comunista en estos asuntos como en casi todos los aspectos de la vida del individuo en Cuba es ampliamente conocida. Esta entidad es simplemente una herramienta de control para las empresas estatales y "no tanto" para el diseñador (ojo con esa diferencia). El "cuentapropista" todavía tendrá la libertad de contratar al pariente que maneja la computadora con absoluta maestría. (cosa que me parece genial).