Macedo Hernández sobre Acerca de la calidad gráfica (48151)
Diálogo iniciado por Candelario Macedo Hernández en el artículo Acerca de la calidad gráfica
Bueno y después de tanta palabrería y referencias a una cultura gráfica, me sigue quedando la duda... ¿qué es calidad gráfica?.
Según este artículo, calidad gráfica es cultura gráfica. Sí, a mí también me dejó en lo mismo, porque la definición de cultura gráfica de este autor es totalmente subjetiva y contradictoria (cultura es lo que a él le parece que es cultura). En su opinión volvemos al método socrático: ʼMagister dixit": el maestro habla, el alumno calla y escucha. Seguramente el autor conoce que el origen de ʼalumnoʼ es ʼa-luminiʼ: "sin luz", la persona a la que le falta iluminación, la luz que solo el maestro puede otorgar. Un artículo lleno de prejuicios, contradicciones y pedantería, totalmente anacrónico.
1º. El autor nunca dijo que iba a "definir que es la calidad gráfica". El artículo se llama "acerca de..."
2º. Para establecer parámetros se requiere de sus extremos. Ante mi tengo dos cantantes, una desafina y la otra no. ¿Acaso algún terrícola podría animarse a cuestionarme si yo afirmo que: «la que desafina canta mal»? - ¿Quién determina que es afinar y que no? Solo los mediocres se hacen esa pregunta.
3º. adn Montalvo, precisamente el autor propone «dar luz» a los estudiantes mostrando los innumerables casos indiscutibles de calidad. Hasta habla de zonas grises.
4º. El autor habla de calidad gráfica. Bien hace la diferencia con los gustos personales. ¿de que prejuicios hablan?
Calidad gráfica, según el autor, es el estándar definido por aquellos trabajos u obras históricamente reconocidas por el "establishment" de la profesión; es decir, lo que los autores, profesores, profesionistas y teóricos más reconocidos admiran.
La etimología de la palabra «alumno» NO tiene nada que ver con la que expresa Montalvo ni la que inadvertidamente valida Arrojo. Es increíble el «exitoso» recorrido que viene teniendo tamaño equívoco, ya que en realidad su significado remite a conceptos tales como «niño bien alimentado», «discípulo bien sostenido y cultivado» y otros que giran alrededor de conceptos similares a estos últimos. No deriva del mal supuesto a-lumini (sin luz) sino de alére (nutrir, cultivar, alimentar, educar).
¿Será esta también una cuestión de calidad cultural?
(Mis disculpas por el uso de comillas donde debiera haber cursivas.)
Héctor, ¿realmente piensas que el autor supone que el hecho de ser autor, profesor, profesional o teórico, convierte a una persona en idónea para juzgar sobre calidad gráfica? ¿No has notado se dirige justamente a docentes de diseño, y les manifiesta su preocupación por su auto-manifiesta incacpacidad para hacerlo y transmitirlo a sus alumnos? No es cuestión de títulos, sino de cultura. Los títulos no otorgan cultura.
No veo el artículo como un intento de validarse como autoridad (aunque Norberto lo es) coincido en que anima a los profesores a respaldarse en su criterio y tal vez un "cuerpo clásico" de obras de la pofesión para formar y juzgar la calidad. El punto a debatir es ¿Quién debe definir cuál es esa cultura?
Es cierto Horacio, no conocía la etimología de la palabra "alumno" y di por validada la que utilizó Adn. Reemplacemos "dar luz" por "alimentar", pues.