¿Cómo afecta la mitificación de la creatividad y la inspiración a la enseñanza del diseño?
Diálogo iniciado por Minerva Vázquez en el artículo ¿Soy o no soy un buen estudiante?
Creo que algo muy parecido pasa con la labor del profesor, un buen docente será siempre un eterno estudiante, continuamente interesado en los últimos métodos de enseñanza.
Ahora, el problema con la enseñanza de las profesiones en las universidades (ya no solo la de Diseño) es que poco se habla del método autodidacta. Se siguen viendo las escuelas como diría Foucault con el mismo rol que las cárceles y los psiquiátricos, y se culpa al docente de no dar los conocimientos necesarios a los estudiantes, cuando en realidad a veces somos una parte de todo el sistema. Claro, hay profesores que es posible ni de estudiantes cumplían con los requisitos de esta lista, por lo tanto es difícil que sean buenos profesionistas ya no se diga docentes en el futuro, pero eso no exime al alumno de su propia labor autodidacta.
Ahora, otro problema de la enseñanza actual es que muchos planes están cayendo en desuso debido a que gran parte del mercado laboral ya no pide tener un criterio o cuestionar, es solo replicar y replicar a base de fórmulas. Por lo tanto, no es raro que nos encontremos con alumnos preguntando: ¿Y eso de qué me va a servir?, cuando evidentemente lo único que les interesa es adquirir un conocimiento que les permita sobrevivir en el mercado y pocos de los puestos disponibles incluyen una metodología que implique nutrirse de lecturas. Ojo, que por esto no estoy diciendo que no se haga, pero realmente al menos en algunos países de Latinoamérica es complicado explicar las bases del conocimiento cuando estas no vienen bien estructuradas desde los primeros niveles.
Sobre el mito de la creatividad es parecido o casi igual al de la inspiración, incluso al del "talento". Son cuestiones que como docentes también nos toca desmentir para no seguir contribuyendo a la mala enseñanza.
… mito, creatividad, inspiración. No se pueden dejar de lado, están allí, no siempre, pero mientras tanto con empeño, investigación, cultura y criterio se puede avanzar. A la educación le falta compromiso, deseo de compartir, a veces siento que se ha quedado envuelta en sistematizaciones, en argumentos que son eso, solo argumentos.
Es evidente que la brutal caída de la demanda de calidad en el mercado del diseño promueve una actitud meramente pragmática en los profesionales, ya desde el cursado de la carrera. Ver "La tragedia educativa" de Guillermo Jaim Echeverry. Allí figura la respuesta de un pedagogo de la Grecia clásica a un alumno que le preguntó "¿Qué gano yo aprendiendo esto?"
Pero esa caída de la demanda no exime de sus responsabilidades al docente y al estudiante. Pues, además de reivindicar el papel principalísimo de la vocación autodidáctica, hay que asumir que la universidad no es una mera fábrica de mano de obra, sino un espacio de formación superior del ciudadano. Durante mis estudios (Filosofía y Arquitectura) yo nunca pensé en mi futura profesionalización, sino en mi desarrollo personal. Aspiraba a conocer aunque luego tuviera que trabajar de taxista. Sería un taxista culto. Y esa formación, sin yo preverlo, me habilitó, mucho después, desarrollar una profesión, ni de filósofo ni de arquitecto, y que prácticamente no existía hasta el momento.
En cuanto a los mitos de la creatividad y la imaginación, lejos está de mi poner en duda esas dos virtudes; lo que cuestiono radicalmente es su mitificación. Generalmente, quienes las mitifican carecen de ellas. Un gran flamencólogo, haciendo alusión, en su programa radial, al famoso cantaor Camarón de la Isla, sostuvo: "Hoy dedicaremos nuestro programa a Camarón. No al Mito-Camarón, sino al artista Camarón. Porque el mito le hace mucho daño al arte.
Durante el primer año de mi periodo universitario llegue a vender tareas a otros estudiantes, cuando el director de la carrera, quien me daba clase se percató, empezó a calificar mas altos los trabajos que había vendido y a mi me bajó las notas, como picándome el orgullo, al siguiente parcial me mandó llamar y me cuestionó al respecto, yo le respondí con la verdad. Necesitaba dinero en ese momento, además de que estaba eliminando la competencia.
Ciertamente mis "clientes" abandonaron la carrera por falta de interés.