Mariaca sobre La inutilidad del Arte (48678)
Diálogo iniciado por Gabriel Mariaca en el artículo La inutilidad del Arte
Entre éste su artículo reciente y el de 2004 Costa es coherente. Hay una línea en su pensamiento que está dedicada a separar el Arte del Diseño y sus "funciones". Es tan coherente que no hay resquicios de evolución. Es estático, elemental y maniqueo. En América Latina señor Costa, el Arte sirvió para evangelizar y catequizar grandes poblaciones de indígenas. Imágenes del Infierno, de ángeles y potestades, carros triunfales, espadas de fuego y vírgenes fueron utilizadas no para la contemplación y el goce sino para una función política del poder, la conversión de infieles y la sujeción a la corona española. Desconocer las distintas funciones que el arte tuvo a lo largo de su historia, desde Altamira hasta las paredes de algún callejón de una favela en Río es desconocer, por incapacidad reflexiva, que el Arte es comunicación porque crea sentidos. Su ignorancia de la historia del arte al igual que su fantatismo de la comunicación como función son ya patéticos.
La defensa del arte en general a partir de una crítica a una de sus partes, que no a toda también me parece de una irreflexión bastante profunda, el asunto no es el arte clásico que tenía esas funciones, el asunto es pasar las bolsas de LV cómo arte en si mismas, recordemos la Mierda de Artista de Piero Manzoni, se burlaba así de los compradores de arte y aún así, estos la compraron a un elevado precio ¿en cuánto está valuada esa mierda? ¿es diferente a la suya o a la mia? El fanatismo hacia cualquier cosa es patético. No todo arte es comunicación, ni toda comunicación es arte. Prueba de ello, los cuadros que pinta un elefante y que se venden en galerías ¿el elefante comunica un mensaje o son los que lo venden quienes se lo suman?
Siento decirte Carlos que si hay diferencia entre la mierda de Manzoni y la tuya. La de Manzoni valía su peso en oro. Ahora vale mucho más que eso. La tuya cuánto vale?
Gabriel: decir que el arte no comunica puede pasarse por alguien ignorante, pero, por un comunicólogo?
Hace ya tiempo que varias de las propuestas de Costa pasaron a formar parte del patrimonio de la Comunicación Visual, es indudable. Son interesantes para ver la construcción y desarrollo del corpus teórico de la Comunicación Visual con influencia casi estricta a América Latina. Pero tomar hoy sus lecturas, sobre todo estas referidas al arte y al diseño, no son más que refritos de lo que hace 30 años venía diciendo, con poco sustento hoy, con más fanáticos locales ya trasnochados que aplauden todo lo que hacía y hace, porque lamentablemente no nos llega todo lo que se produce en inglés. Y con respecto al arte y la imagen solo bastaría que Costa le de una repaso a "El Poder de las Imágenes"de David Freedberg, para que no siga proponiendo una línea de análisis que no se sostiene ni con engrudo. Y sí, es más comunicólogo que diseñador lo que aclara por qué el énfasis a todo lo que produce pasa por el filtro de la comunicación y no del diseño como oficio.
Gabriel, completamente de acuerdo. Lo explicaste muy bien. Esos trasnochados que aplauden al nombre y no a lo que dice. Se deslumbran por cualquier cosa. Aprovechando el camino: el diseño grafico y el arte han resultado muy atractivos para muchos que sin ser artistas ni diseñadores explican como debe hacerse, y les aplauden y rinden algunos fans. Inventan postulados e intentos de teorías que quieren hacer parecer interesantes, son los sofistas contemporáneos.
Perdona pero esas obras "de arte" no fueron más que el resultado del trabajo de ilustradores (obras por encargo con un discurso definido, digamos que tenían un brief). Costa habla del artista de manera más amplia, del que hace lo que hace por que quiere, no porque se lo pidan.
Seguro que la mia vale más en un sentido utilitario por ejemplo, enterrada en un jardin, tiene mayor valor nutrimental para las plantas que la rancia de Manzoni, para Manzoni valdrían lo mismo, pues de allí su crítica y sátira, quien creé lo contrario claramente no entendío el sentido de su obra. A lo que voy, muchos críterios distintos desde donde analizarlo, muy cerrado el quedarse con solo uno y pensar que es la verdad más absoluta.