Diseño de producto sustentable

El diseño debe asumir su más auténtica y noble función que es la de mejorar la calidad de vida de las sociedades. «Aquel desarrollo que satisface las necesidades de las generaciones presentes sin comprometer las posibilidades de las generaciones futuras para atender sus propias necesidades».¹

Un concepto de sustentabilidad y desarrollo como este, nos abre paso a diseñar de una forma más comprometida con la sociedad, la ecología, el proceso de fabricación de productos, para fomentar una buena educación a la sociedad y a los diseñadores. En definitiva, el producto ecodiseñado es tan eficaz como cualquier otro producto del mercado, pero suma un plus: su mayor influencia en la cultura.

Pilares de sustentabilidad

Existen tres aspectos que constituyen el soporte que hace que un proyecto o un sistema sean sostenibles en el tiempo.

• Sustentabilidad ambiental: significa preservar y enriquecer el ecosistema local y global, evaluando y mejorando el impacto del proyecto en el medio ambiente.

• Sustentabilidad social: el proyecto debe proponer un desarrollo que mejore la salud y el bienestar de una comunidad, dando oportunidades de trabajo y promoviendo la creación de negocios, crecimiento personal, educación, salud y aprendizaje de por vida.

• Sustentabilidad económica: significa que un desarrollo es rentable debido a prácticas claras de negocios, con beneficios de costo apreciables gracias a la implementación de políticas estratégicas de sustentabilidad, tales como conservación de agua y energía. Significa crear riqueza para inversionistas y propietarios, trabajos para la gente de la comunidad, y un nuevo desarrollo de negocios en la economía local.²

Estos pilares de la sustentabilidad nos abren paso a muchas ideas de diseño que podemos realizar para el bienestar de la sociedad y del medio ambiente, creando nuevas experiencias, una forma de vida diferente al consumismo y a la vida sedentaria, una mejora del mercado local, incluso practicas de comercio diferentes, todo para el bien común, el medio ambiente y una mejor vida.

La sustentabilidad propone que se genere producción pero sin alterar los recursos naturales. Significa mantener la estabilidad del ecosistema. Implica reconocer el soporte natural; es decir, cómo el capital natural primario puede ser potenciado, revalorado mediante la tecnología o capital secundario con criterio de autosuficiencia local. Lo que propone emplear mínima importación de materiales y energía extra-local, además de exigua exportación de desechos para reducir o mitigar los efectos regresivos. Hay verdadero valor agregado cuando se ha verificado un nivel bajo o nulo de impacto ambiental.³

Hoy en día nuestros diseños emplean menos procesos, materia prima reciclada, menos desperdicios, menos energía y así es más probable que los productos sean más sustentables. Con el paso del tiempo nos encontramos con otro dilema, cuando nuestro producto esté llegando al final de su vida útil, ¿qué debe hacerse con él? ¿Donde tirarlo? ¿Cómo reciclarlo? Que el producto esté preparado para ese momento que siempre llega, también es agregado de valor.

Un diseño bien gestionado debe alargar la vida útil de los materiales, ya sea:

• Previendo su reciclado: cada materia prima ofrece diferentes posibilidades de reciclado. Evitando dañar más al medio ambiente, el producto nos esta dando más de lo que esperábamos.
• Previendo su reutilización: Se puede reciclar dos de las seis piezas de un producto y las otras cuatro pueden generar otras ideas de productos que el usuario necesite en casa. Lo único que puede hacerse en estos casos es considerar esas posibilidades para que el usuario pueda obtener otros productos. Dependiendo del estado del material se le podrá dar un valor agregado al producto y a la empresa que lo fabrica (ser una de las muchas empresas que están preocupadas por el medio ambiente).

Conclusión

Los diseñadores industriales debemos gestionar el diseño de producto muy a fondo para poder ofrecer productos a usuarios que puedan reciclar y reutilizar. Gracias a los avances de la tecnología es posible que nuestros productos se puedan fabricar con menor impacto ambiental. Sólo es cuestión de enfocar bien el concepto para que el producto tenga un impacto social. La responsabilidad queda en manos de los diseñadores.

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