Mejia Chimbolema sobre Bauhaus, estética y capitalismo (56103)
Diálogo iniciado por Steven Paul Mejia Chimbolema en el artículo Bauhaus, estética y capitalismo

Este recorrido por la historia de la Bauhaus me dejó reflexionando sobre cómo el diseño no nació simplemente como una herramienta estética o decorativa, sino como una poderosa forma de responder a necesidades sociales, industriales y humanas. Me llamó la atención cómo esta escuela, hace ya 90 años, supo integrar arte, técnica y producción en una visión adelantada a su tiempo.
Lo más valioso de su legado, más allá de los nombres célebres como Gropius, Moholy-Nagy o Mies van der Rohe, es esa capacidad de pensar el diseño como un puente entre creatividad y funcionalidad, entre lo bello y lo útil, entre lo ideal y lo posible. Incluso en su etapa más politizada, bajo la dirección de Hannes Meyer, se reafirmó que el diseño también puede ser una herramienta de transformación social, pensada para mejorar la vida de la mayoría y no solo de una élite.
Es curioso y algo paradójico cómo, a pesar de esos orígenes con tanto compromiso, el diseño haya terminado siendo tan absorbido por el sistema capitalista de consumo masivo, convirtiéndose muchas veces en simple estrategia de venta. Pero también es entendible: vivimos en un mundo donde lo visual y lo inmediato dominan.
Aun así, saber que la Bauhaus fue ese punto de partida que lo cambió todo, me inspira. Nos recuerda que el diseño puede tener un propósito más profundo, y que detrás de cada objeto bien pensado puede haber una idea, una intención, una ideología. No es solo hacer cosas lindas; es hacer cosas que valgan la pena. ¡Larga vida, sin duda, al legado de la Bauhaus!