Diálogo Nº 51095
Diálogo iniciado en el artículo El color como marca
Dicen que el demonio está en los detalles, si algo es cierto es que nosotros los diseñadores estamos obsesionados con los detalles. Me encantó como se dio un uso tan sutil del color para darle un estilo único al producto, y a la vez facilitando experiencias con la misma, es tan épico que no tengo palabras para describirlo. Yo creo que, el color no solo es un factor más a tomar en cuenta a la hora de diseñar una marca, es un paso fundamental. Y si bien es cierto que cada persona tiene una relación personal con los colores, dado que todos tenemos experiencias únicas y nos relacionamos con los colores de acuerdo con nuestras vivencias, es también cierto que al colocar el color como un aspecto que define a la marca, le otorgamos personalidad y estilo. Como diseñadores, somos como los chefs, no inventamos los ingredientes, pero tomamos unos pocos y los combinamos en las cantidades y formas exactas que hacen que una marca ofrezca al público formas de expresarse y tener es interacción que engancha con el producto. Las marcas que hacen esto nos provocan una reacción emocional al traer a de la memoria los recuerdos y experiencias que hemos vivido junto a seres queridos.