Franco sobre Tejer pensamiento (25911)
Diálogo iniciado por Carlos Franco en el artículo Tejer pensamiento
Excelente aporte señorita Vasquez, felicitaciones. Siempre he dicho que no tenemos porque ver siempre hacia el norte, si en el sur y nuestras raices esta el diseño, lo traemos desde tiempos precolombinos, nosotros aqui nacimos, no somo imigrantes. Todas nuestras artesanias estan colmadas de diseño, formas, colores y texturas. De ahi debemos partir todos como diseñadores latinoamericanos.
Carlos, me parece interesante lo que Ud. plantea, fijarnos en nuestras raíces como diseñadores, creo que de ahí podríamos lograr grandes cosas no solo para nuestro beneficio si no para el beneficio de este tipo de comunidades y aunque en el caso de muchos diseñadores es evidente que tratan o tratamos en ocasiones de ver hacia el mismo punto como Ud. lo menciona, también me parece que si todos miráramos hacia nuestras raíces pasaría exactamente lo mismo, y aunque me parece admirable el hecho de vincularse con estas comunidades para ver su cultura creo que es algo que va también en el corazón.
Carlos al igual que ud estoy deacuerdo en mirar hacia el sur, hacia
nuestras raices, ya que es increible el aporte que las culturas autoctonas
de cada región le puede aportar a nuestra formación como diseñadores
aunque citando a Giu Bonsiepe: Enlace no tenemos una identidad en el diseño
latinoamericano, y creo que a partir de este trabajo con comunidades
es posible empezar a fojarlo y dejar de ver un poco
mas hacia el norte y encontrar en el sur nuestro propio norte
¿creen que es posible sentar las bases de ese
modo?
Totalmente de acuerdo, creo que no solo es posible sentar las bases en nuestra cultura sino que es necesario diseñar desde ella, precisamente dice Bonsiepe «la identidad del diseño latinoamericano hay que crearla, pues no existe», y considero que ello tiene que ver con el «sueño americano del diseño», un deseo por ser aceptado en otras realidades, viendo otras culturas y diseñando para ellas, no digo que esté mal hacerlo pero creo que si buscamos una comunidad en latinoamerica con una identidad representativa, tal vez empezar por valorar lo nuestro sea una de las mejores formas para lograrlo.
Carlos, es nuestra labor sembrar y cosechar cada día más nuestra labor como diseñadores latinoamericanos y es valioso hacer crecer con argumentos y acciones responsables que es posible co-diseñar junto con las comunidades étnicas y artesanales que nos rodean en nuestras naciones. Como manifiesta Ana María, el hecho de tomar un nuevo rumbo es dado en el corazón y es motivado por nuestros deseos de ir más allá. Al igual que Alejandro y Jenny, pienso que un camino hacia nuestra identidad como diseñadores es el diálogo de saberes y la participación con las comunidades.¿Piensan que esto es posible?