Feinsilber sobre La calidad existe y es irrenunciable (35519)
Diálogo iniciado por Sebastián Feinsilber en el artículo La calidad existe y es irrenunciable
Si el «todo es relativo» es la coartada del inculto, Schopenhauer, Borges, Lacán o Deleuze por lo pronto fueron grandes incultos. «Todo es relativo» no es el punto de llegada, sino el punto de partida.
En 1938, en Salzburgo el Gobierno Alemán conducido por Hitler presentó la famosa exposición «arte degenerado«(Entartete Kunst) presentando despectiva y proscriptivamente lo que hoy conocemos como arte moderno. Para ellos la calidad existía y era irrenunciable.
No comprendo la relación que establecés entre la calidad gráfica y el rechazo al arte moderno. Como no tengo tanta información te pregunto: ¿Es que el Gobierno de Hitler estaba en contra del arte moderno porque encontraba que no tenía calidad gráfica, o habría otros motivos muy diferentes?
Tampoco veo la relevancia de remarcar que «todo es relativo» es un punto de partida. Porque según mi interpretación, el texto se refiere a la calidad gráfica en los resultados (en el producto final) y no en el punto de partida. ¿O acaso pensás que en la gráfica, en su «punto de llegada», se puede renunciar a la calidad?
Todo totalitarismo plantea su propia concepción de la estética, y lo hacen discriminando lo que entienden por «bien» y «mal». Lamentablemente todavía como sociedad global no los podemos superar.
Pienso que hay muchas formas de entender la «calidad» de una pieza de comunicación.
Claro que hay muchas formas, o mejor dícho, muchos aspectos de la calidad. Pero este artículo se refiere únicamente a uno de ellos: la «calidad gráfica», que no es lo mismo que la «estética».
Para que quede clara tu posición: ¿estás sugiriendo que decir que existen productos gráficos de mejor y menor calidad gráfica es una actitud totalitaria?, ¿o que decir que no todo el mundo está capacitado para evaluar la calidad gráfica es una actitud totalitaria?, ¿o estás hablando de otra cosa?
Entonces, la opinión de un estudiante de Kinesiología ¿sería tan calificada como la de Milton Glaser, a la hora de decir si un producto gráfico tiene o no calidad gráfica?
Aunque esa pregunta queda anulada por tu afirmación de que no existirían productos gráficos con mayor o menor calidad gráfica. Es decir que la calidad gráfica no sería un parámetro evaluable. Según vos, todos producto gráfico tendría la misma calidad gráfica.
¿Entendí bien?
No, para nada. El problema está en la categoría «calidad gráfica», es reduccionista y discriminatoria. Limita el análisis a aspectos técnicos incorporando, sin asumir, cuestiones de índole estético.
Llegamos a un punto de acuerdo, porque toda categoría de análisis sirve justamente para poner el foco en un universo «reducido», delimitado, para «discriminar» (en el sentido de diferenciar) uno o más aspectos específicos del objeto de análisis.
Sería imposible no incorporar a la estética en esta categoría, porque la calidad gráfica no se valora en base a unos parámetros universales y estrictos, sino considerando el género gráfico. Cada género gráfico (no confundir con géneros de la comunicación) tiene sus propias reglas sintácticas más o menos estables y se inscribe en un universo estilístico.