Hugo Javier Espinosa

Comparto el concepto y muchas de las opiniones de los colegas, en lo personal considero que es un aprendizaje constante entre diseñador-cliente, nosotros conocer mas sobre su negocio/ empresa y él mas sobre nuestra profesión, puede ser que ahí estamos fallando. Hacer docencia del diseño y trabajar en conjunto con el cliente, que participe y tome decisiones (obviamente dentro de las soluciones que le demos y no al azar), que sea parte del proceso. Claro está que, como profesión ligada al «hacer», el «delibery de diseño» estará siempre a la orden del día.

Excelente articulo Martina, la alumna que te entrevisto habrá quedado mas que agradecida por la calidad de tu respuesta. Muchas veces cuesta transmitir que la inspiración no viene sola y para ello es necesario conocer, investigar, hacer y rehacer, etc; claro está que «somos lo que comemos», y la inspiración está en la alimentación (información) que incorporamos y analizamos durante las distintas instancias del trabajo.