Henry Picón

En una ocación, cuando cursaba mis estudios en la licencatura de diseño gráfico, en un congreso que se dío cerca de la presentación del simbolo que representaría a la escuela de diseño, uno de los presentes pregunto a la ponente quien era agena a dicho proyecto, incluso era una invitada internacional, dijo no entiendo como se vincula ese elemento gráfico a dicha escuela y enfatizó: si un diseño requiere llevar grabado un audio o texto que explique la intensión del mismo, entonces, seguramente el identificador no está haciendo su trabajo.

Comparto que la inclusión de los fragmentos de Nerón le restaron seriedad al video, pero de allí a no tener las capacidades para percatarse que lo que se tenia antes era mejor a lo nuevo, deja sin efecto una opinión

Totalmente de acuerdo con el análisis y con la apreciación, hay una tendencia incomprensible a unificar las marcas, ahora todas se parecen, se descarta la idea de que la marca sea única, distinta, se tira a la basura rasgos diferenciadores que ya tenia la marca.

No se puede ver de manera tan ligera. Hay muchos ejemplos de grandes marcas que están cambiando, pero cambiando para mal, se dejan llevar por la prisa y se unifican entre si, dejan atrás las características que las distinguían, llevados por la tendencia se hacen parecer a las demás.

Interesante artículo, sin duda la gráfica popular impulsa la expresión de un país, creo que uno de los ejemplos más impactantes de esta fuerza popular viene del trabajo de los artesanos Mexicanos, que se integra al trabajo realizado por los profesionales de ese país.

No es de extrañar que los nuevos egresados tengan mucho conocimiento teórico y poco práctico, escuchan hablar sobre calculo de texto, pero su profesor no tenía idea de que era un componedor, o de como en el mundo físico se podía utilizar una cartulina entre el cuerpo de cada tipo para ganar interletrado. Hay que valorar la experticia, el saber hacer, no solo en las carreras relacionadas con el diseño y las artes, todos los catedráticos precisan tener un conocimiento práctico real para poder enseñar el oficio. Gracias por el artículo Jorge.

El tema del emprendimiento va tomando cada vez más fuerza en muchas economías, pero tristemente la sociedad no enseña a los jóvenes a ser emprendedores, ni en bachillerato, ni en la universidad, la educación pretende que logremos ser los mejores empleados y eso no se escapa del pensum de las carreras de diseño gráfico. Es tan así que los diseñadores cuando comienzan a ejercer de manera freelance su profesión, una de las grandes preguntas que aparecen es ¿Cuánto cuesta mi trabajo?

Creo que el Diseñador también puede ser parte del emprendimiento, sería fantástico si eso germina como parte de un equipo multidisciplinario.

A ningún diseño lo salva una explicación, puede haber mucho estudio tras bastidores, pero si el resultado no lo expresa, si el usuario no lo percibe, el elemento gráfico simplemente no cumplió con el cometido.

El color amarillo debió quedar como un color secundario, uno que permita dar realces en algunas aplicaciones. Es inexplicable que los diseñadores involucrados dejaran como posibilidad; no solo dejar el amarillo sino usar la marca en blanco sobre el, restando cualquier posibilidad de lectura.