Branding: la gestión de la reputación frente a la explicación del logo

Las empresas utilizan signos gráficos, logos, para identificarse porque no tienen un rostro como tenemos las personas, y resulta curioso que cada vez que hacen un cambio en sus signos identificadores se les ocurre explicarle al público por qué son como son, qué es lo que significan. Pero te pregunto: cuando vos te cambiás el peinado o te dejás el bigote o la barba, ¿vas a ir por el mundo explicándole a la gente lo que significa la forma de tu barba, lo que representa? No, eso no se explica. A lo sumo, si alguien nos pregunta, le podemos contar cuáles son los motivos por los cuales decidimos cambiar de look. ¿Por qué las empresas creerán que ellas sí necesitan explicar cada vez que cambian un logo o modifican una letra o lo que fuera? Hoy, la mayoría de los diseñadores de marca no se dedica al diseño de signos marcarios, sino a la construcción de unas historias fantásticas que vienen acompañadas de dibujitos, y ahí van por el mundo muchas empresas contando tonterías sobre sus marcas gráficas, mientras que al público le importa un rábano. Atentos, empresarios: branding no es inventar historias y repetirlas por todos lados. Branding es gestionar la reputación de la marca, y decir tonterías no le hace bien a la reputación de nadie. [Música]