El impacto real del cambio de logotipo en la imagen de marca
Todo cambio sutil, que sea un ajuste para mejorar y el público no lo note, no pasa nada. Eso no tiene costo. Pero cuando el cambio es notorio, algo hay que hacer: informar por qué se cambió.
Puede ser que en algún caso, a pesar de haber un rediseño, se perciba como la misma marca. En ese caso, hay que hablar menos y no decir mucho, porque si vas a empezar a explicar, tenés que básicamente admitir que tu logotipo anterior era una porquería. ¿Y para qué vas a decir eso? Si no es un buen mensaje, mejor no decir nada.
Ahora, si cambió el perfil, bueno, ahora somos de otra manera y por eso cambiamos de signo. No explicar que el signo ahora representa tal cosa, porque eso no se lo cree nadie. Pero sí puedes decir: "Ahora somos distintos y por eso renovamos nuestra identificación con un nuevo signo". Eso puede ser, es válido.