Andrea García

Muy interesante tu artículo. Por desgracia todavía nos vamos por lo físico más que la acción de los candidatos. El hecho de no querer informarse uno de la trayectoria de cada candidato hace que las campañas con mucho brillito (efectos de After Effects) y efecto de Photoshop engañen. Al menos aquí en el Municipio de Querétaro, México, la administración pasada, no contrato gente especializada. Su imagen fue dirigida a jóvenes, pero «en el municipio no solo viven jóvenes», el gráfico que predominaba era un tache (cruz) y su resultado, un desastre en la administración. Internamente era un caos.

En mi opinón no marcará tendencia. Más bien así es como está el mundo. Rompiendo paradigmas, caos. Tratando de llegar a una búsqueda de algo. Creo que marca la época del caos en todos los sentidos.

Un nuevo enfoque del diseño editorial digital. Me gusta la manera sencilla que se introduce este tema con productos actuales. Algo que cada uno de nosotros, quienes nos gusta este parte del diseño, debemos difundir.

A pesar de que hay más conciencia de lo que es la marca, no se toma con seriedad en ciertos casos.

En mi experiencia, institución pública municipal, si no hay un guión: qué, para quién y cómo; es difícil el posicionamiento. Habíendo tanta competencia verdadera o falsa y con ello la credibilidad de lo que se vende. A fin de cuentas la marca es la identificación de un ser: persona, institución o producto.

La tipografía veo que va con el gráfico, más sin embargo la lectura que tiene «Londo» al minimizar se perderá. Los cículos también se perderán. Es importante que al crear un símbolo tenga lectura tanto a su máximo tamaño como el mínimo. Muchas veces el mismo te da la respuesta de la legibilidad y leibilidad de un símbolo.