Angela Toral

Me pareció interesante la comparación entre las marcas y los dioses antiguos. Nunca lo había pensado así, pero tiene mucho sentido. Hoy las marcas no solo venden cosas, también intentan darnos seguridad, identidad, sentido y a veces nos dejamos llevar sin cuestionar mucho. Me gustó la idea de resignificar y preguntarnos qué están diciendo realmente las marcas y por qué. Creo que si empezaran a conectar desde un lugar más humano, podrían tener un impacto más profundo.

Estoy a favor de que las marcas tengan un color corporativo porque ayuda a diferenciarlas y hacerlas reconocibles de forma rápida, especialmente en entornos visuales saturados. Un ejemplo claro es el rojo de Santander: dentro de sus locales, cualquier objeto rojo se interpreta como parte de su identidad. Aunque no siempre es imprescindible, creo que usar el color como parte de la identidad fortalece la presencia de la marca y mejora su comunicación.

Esto es una problemática real, los diseñadores actuales tanto en moda como gráfico ocurre esto de "voy a buscar referencias" o "voy a buscar en pinterest" y a todos les termina saliendo las mismas cosas, entonces termina siendo normal que las cosas se parezcan, o sean iguales.

Me parece que muchas veces se complican demasiado con los conceptos y terminan aplicando ideas que no siempre funcionan bien para la identidad de una empresa. Yo creo que es importante que los signos y marcas cumplan su función básica sin perderse en modas o ideas superficiales, y que quienes los diseñan entiendan bien para qué sirven realmente y adapten su trabajo a eso, más que solo buscar ser creativos sin una opinión clara.

La verdad, el diseño gráfico no es lo mío, pero me pareció interesante entender cómo funciona una marca de producto y todo lo que implica que se vea bien en un envase. No sabía que el logotipo tenía que ser tan legible y reconocible, sobre todo en un supermercado donde todo compite por llamar la atención. Me sorprendió que no se busca transmitir valores o emociones desde el diseño de la marca, sino simplemente identificar el producto, y que muchos rediseños que vemos en realidad son ajustes pequeños que casi no notamos y que cuando un cambio radical pasa, probablemente pensemos que ya no venden ese producto porque no lo vamos a identificar.

Después de leer este artículo, me doy cuenta de lo mucho que se simplifica el trabajo de construir una identidad visual. Muchas veces creemos que diseñar un logo es solo hacer algo estéticamente lindo, pero en realidad implica entender a fondo la marca, su historia, su público y el contexto en el que existe. Hoy las marcas son experiencias, no solo símbolos, y como diseñadores tenemos que asumir ese desafío con una mirada más amplia.

Este artículo me enseñó bastante sobre como funcionan estas cosas, porque yo de manera inconsiente a todo le dice logo pero por ejemplo, como dice en el texto un logotipo es una manera de escribir el nombre por así decirlo, entonces en marcas de moda como vivienne westhood tiene tanto un logo como un logotipo porque funciona de las dos maneras.

Lo que siempre se cree es que la marca es un logo, o simplemente es mcdonalds por ejemplo, lo que realmente pasa con tu relación con la marca es lo que te hace sentir, lo que te cuenta. Eso me parece increíble.

Justamente, he estado observando muchos artículos sobre branding para poder entender de mejor manera esto. Lo que me parece más interesante es el hecho de que todo tiene una historia, todo está conectado. Por ejemplo, si el punto a no está conectado con el d, el plan falla. Me encanta ver cómo todo importa y todo comunica.