Daniela Barrera

Indudablemente es todo un reto hacer de la arquitectura efímera un espacio que genere recordación en los espectadores, relacionándolos y sumergiéndolos en una experiencia única que desarrolle un vínculo instantáneo entre el mismo y su entorno inmediato. Tal experiencia conmovería al público, evocándola y relacionándola constantemente con parte de sus vivencias cotidianas.

Dicha complejidad se disolvería con la colaboración de las disciplinas que nombraste, desarrollando un trabajo colectivo con diferentes posturas y posibles soluciones. Es asi como vale la pena arriesgar y proponer