Diálogo Nº 768
Diálogo iniciado en el artículo ¿El docente de diseño debe mostrar modelos a sus alumnos?
Es indudable que plantear un problema en un Taller de Diseño o Proyecto Creativo, debe ser desarrollado desde la base enteramente por el estudiante, no puede ni debe suministrarse el ejemplo puntual frente al problema a resolver. Es parte del proceso creativo el indagar y explorar de manera individual, cuál será la mejor manera de encaminar la investigación dado que debe ser asumido de manera coherente el planteamiento del «que, como, cuando, porque y el para que del objeto a desarrollar». El ejemplo de resultados anteriores a propuestas similares, puede aportar en cuanto que orientan al individuo. Sin embargo «mostrar» deberá ir acompañado de la reflexión necesaria en la que los estudiantes desarrollen la capacidad de análisis y descubran por experiencia propia aciertos y falencias y las puedan capitalizar motu propio en el desarrollo de sus propias propuestas. Un Taller de Diseño, o un Proyecto Creativo, a diferencia de las demás asignaturas dentro de los programas académicos, implica ejercicio de práctica y aporte por parte del estudiante en un cien por cien donde deben converger todos los conocimientos adquiridos en las asignaturas de formación adquiridas dentro de su estructuración. La iniciativa, en este tipo de Talleres, es fundamental y la manera como el estudiante capitaliza lo adquirido con antelación, será lo que mide su competitividad frente a «la vida real». Un Taller, de alguna manera debe asumirse como cuando se propone la participación en un concurso o convocatoria, donde no hay más información que la estrictamente necesaria para esperar respuestas a necesidades específicas tan frescas y variadas como personas y culturas las propongan. En mi opinión, los ejemplos siempre serán bienvenidos en las asignaturas formativas, pero en los Talleres y Proyectos Creativos, los ejemplos deben hacer parte del proceso y por ende ser parte del estudio de casos para ser aportados como parte de la sustentación de manera individual o por parte del colectivo encargado del desarrollo del trabajo.